En la actualidad, diversos actores como los científicos, ingenieros y líderes empresariales buscan soluciones tecnológicas para hacerle frente a los grandes retos que se viven.

Dicha acción representa una tarea que requiere experiencia y una cultura que impulse el aprendizaje continuo, así como la experimentación diaria.

Así, para que todos los proyectos alcancen el éxito, se requiere de habilidades esenciales y específicas que concentren los equipos de trabajo, para lo que es necesaria la cultura de aprendizaje.

De acuerdo con el artículo “Tres pasos para construir una cultura de aprendizaje que genere innovación”, publicado por el MIT Sloan Management Review México, de esta forma se puede lograr una cultura de aprendizaje.

• Desechar el ego, porque de esa manera ningún sentimiento de superioridad o importancia personal se interpondrá en la ejecución del plan para lograr los resultados que se espera, por lo que es importante que haya una buena relación en el equipo para operar en sinergia.

• Crear un optimismo a largo plazo es una habilidad que se aprende y se transmite para mantener el ánimo de todo el equipo de trabajo. Así, cuando algo sale mal se atribuye a fuerzas externas y se evita culpar a los colaboradores que diario dan lo mejor de sí, aunque debe haber un equilibrio para tener percepciones realistas.

• Aplaudir cada éxito es reconocer el esfuerzo de los colaboradores, lo cual es de gran importancia, porque las personas al experimentar una sensación de progreso, se vuelven más productivas. Incluso, vale la pena celebrar cada avance por muy pequeño que parezca, porque ayudará a resolver los desafíos.

“Cualquier organización puede mantener el esfuerzo en los momentos más difíciles. Cuantas más organizaciones construyan estas culturas, más avances hará la humanidad”, finaliza el texto.